Exámenes finales

Por si no lo habéis notado en la calidad de las entradas, estos días estamos con exámenes finales: hoy el de Sociales (lo tenía todo bien, pero en el último segundo he pensado que el primer conde de Aragón no era Aznar Galíndez, sino Ramiro I… Craso error), mañana de Tecnología, que lo llevo bien; básicamente es un poco de teoría y ley de Ohm (I=V/R). El viernes tenemos el de Naturales (ecología y un poco de química), y el de Matemáticas (entra todo el libro; tengo que repasar algo de funciones, pero va bien). Aprovecho en este ratito para escribir desde el ordenador de mi padre, aunque creo en breve me echarán. O no, porque mi padre está explicando a mi hermano a contar en binario (se han viciado al Abscondita Sapientia, al igual que mis amigos). Hablando de binario: es bastante útil, aunque si lo aplicas al método de los dedos y vas contando por la calle la gente te mira con cara rara (experiencia propia).

Por otro lado, ayer me llegaron las revistas a las que estamos suscritos (Quo y Muy Interesante), y la verdad es que son muy buenos los reportajes del mes de ambas: de Quo, uno sobre cómo evolucionó el español y a qué llegará a ser (influencias de SMS, extranjerismos…), y de Muy Interesante uno sobre las habilidades básicas que debe que tener un habitante de ciudad del siglo XXI, divididas en Internet, orientación, vehículo y primeros auxilios).

Y si tengo algo de tiempo más tarde, puede que me acabe “La Daga”, el segundo libro de la trilogía Luces del Norte (el primero es “La Brújula Dorada“). Está muy bien; me está gustando más que el primero… Ya haré resumen.

Voy a ver si hago algún ejercicio de la ley de Ohm…


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