oct 5 2008

Cumpleaños en Paniza y lo más raro que me ha ocurrido desde hace tiempo

Y va el relato del segundo cumpleaños en esta semana, sólo que esta vez se trata del de Javier, o más comúnmente, Flo.

A las 11:45 nos han pasado a buscar a casa de mis abuelos, ya que mis padres no están (ahora mismo estarán llegando a Zaragoza), para ir a Paniza. Después de 35 minutos en coche y con alguna que otra broma (ayer compramos algunas cosas “graciosas”, como caramelos amargos, un cigarro que echa agua o un paquete de chicles que te pilla la mano), llegamos al pueblo. Allí ya hemos ido un poco “de exploración”, a ver qué había por la zona. Después de llegar a un alto (como a 1 km de la casa), han llegado los demás, haciendo que estuviésemos todos (25 adultos y 10 adultos pequeños). Hemos estado esperando los 4 que estábamos en la colina a que llegasen los otros 4 (2 eran niñas pequeñas), y finalmente han llegado. Desde ahí, hemos vuelto a bajar, pero por un camino diferente. El pequeño problema es que hemos tenido que atravesar 10 metros de zarzas, y cuando nos hemos querido dar cuenta estábamos atrapados por un montón de vegetación con pinchos. Evidentemente, nadie quería dar la vuelta, por lo que nos hemos quedado un rato parados. En este dibujo (un poco esquemático, lo sé) se explica bastante bien la ruta que hemos tomado:El punto rojo es e lugar en el que nos hemos quedado pensando qué hacer, y lo gris una zona donde se puede vadear el riachuelo.

E caso es que estábamos ahí quietos (mi hermano no, parece que sus pies querían irse hacia las zarzas), hasta que a mí se me ha ocurrido coger un pañuelo de papel usado, y poder apartar así las ramas. De este modo yo he conseguido salir (los demás no, no querían usar mi pañuelo de papel de doble uso usado), y poco a poco hemos conseguido llegar hasta arriba (ellos se han valido de una chaqueta).

Al llegar a la casa, hemos comido, jugado un poco, y entregado regalos. También hemos usado otra cosa que se empeñó en comprar mi hermano, unos tubos que lanzan confeti. Teníamos dos pequeños, uno de 40 cm y otro, bestial, de 80 cm. Funcionan con aire comprimido, y con decir que me han hecho pitar los oídos durante cosi un minuto, es suficiente…

Después, hemos ido a dar otra vuelta pero por otro camino, pero de repente he notado un cric, y se me ha soltado un bracket. Se me soltó otro hace unos días, pero como mañana voy a ir al dentista a que me pongan la parte de abajo, no fui para que me lo arreglase. Como el suelto de hace 5 días y el suelto de hoy estaban juntos, y eran los últimos de la fila, se me han caído. Vamos, que tenía dos brackets en la mano y un alambre de algo más de 3 cm. en la boca.
Por suerte (para mí), una amiga de mis padres que estaba allí es dentista, y me parece que ha hecho algo que no repetirá demasiado…
Al principio, me ha dicho que no pasaba nada, pero que me haría unas heridas enormes (obvio). Entonces me ha llevado a dentro de la casa, me ha sentado en el sofá, y ha intentado cortar el alambre (inútilmente) con unas tijeras de cocina. Ha estado pensando, y ha vuelto con unas tijeras de podar de 30 cm. No es muy agradable tener semejante instrumento en la boca, pero ha conseguido dejármelo perfecto, para que mañana me lo arreglen sin ningún problema. Luego ha terminado de unir el extremo de alambre con el bracket del extremo, y fiesta.

Un rato después, nos hemos ido a dar otra vuelta, y cuando estábamos volviendo, ha aparecido uno de los mayores con una bata blanca, una máscara de muerte, un puñal de plástico y una maza de madera (ésta no era de broma, la había cogido del taller…). La niña pequeña que iba con nosotros ha empezado a llorar, y entonces se ha acercado y le ha dicho que era una persona normal. Yo, sigilosamente, le he dado una bomba fétida a un amigo para que la echase en el suelo, pero se le ha ocurrido algo mejor. Le ha pedido que se levantase la máscara, que se tapase los ojos y que confiase en él. Un segundo después, tenía un paquetito a punto de estallar en el pecho, dentro de la camisa. Ha estallado la bolsita interior (son unos sobres con polvos y un sobrecito lleno de algún ácido, que cuando se revienta reacciona y hace estallar el sobre, provocando un olor bastante malo), y de repente han aparecido unas manchas de líquido en su bata. Hemos huido corriendo, y al llegar nos han preguntado que dónde estaba el “fantasma”. Un minuto después, llegaba sudando como un pollo y apestando a algo extraño…

Al volver, he conseguido darle a alguien un caramelo, que al principio saben ricos, pero que al llegar al centro dejan un sabor de boca asqueroso. También hemos hecho el mandrias con un cigarro, espantando a alguna que otra ancianita que iba por la calle, pero eso no ha sido nada comparado con ver a alguien de unos 40 años, con bata blaanca de monje y oliendo a una sustancia difícil de identificar…


oct 4 2008

Campeonato de Trial 2008

Ayer, después del entrenamiento, nos fuimos a casa de nuestro amigo Juan Carlos para ir a ver el campeonato de Trial al pabellón Príncipe Felipe, uno de los eventos que abren las fiestas del Pilar este año.

En total íbamos 6: Juan Carlos, mi hermano, Víctor, dos de clase de Juan Carlos y yo. Llegamos con 50 minutos de antelación para pillar buenos sitios, aunque la espera se hizo más corta gracias a unos bocadillos de ternasco y patata :-)

Al empezar, se presentaron los 6 ó 7 concursantes, y uno por uno comenzaron un circuito. El que más destacó (lógicamente) fue el campeón del mundo del 2007, un tal Bowl. Era impresionante ver cómo subía casi dos metros de un salto con la moto, o salía volando a cuatro o cinco metros de altura por una rampa. También salió el campeón de BMX haciendo lo mismo que las motos, pero bastante más ágil.

Cuando acabó, en el viaje de vuelta, tuvo bastante éxito el sonido que uso como despertador en mi móvil, pero eso ya lo contaré otro día… (he descubierto que el móvil es mejor despertador que el propio despertador)

En fin, ya puedo decir que he ido a un campeonato de Trial, y la verdad es que me gustó.


oct 1 2008

Quasar Elite

Hoy era el cumpleaños de mi amigo Gabriel, así que mi hermano y yo hemos ido con él y más gente a Quasar Elite, un laserdromo nuevo que hay en Zaragoza. Es impresionante: 20 minutos, dos equipos, cada jugador con un peto y una pistola láser. Todo ello en un laberinto con luces estroboscópicas, efectos láser y una semipenumbra.
La cosa consiste en disparar el mayor número de veces al equipo contrario, evitando que éste te dispare a ti. Pero la cosa se complica al tener cada equipo una base, a la que hay que destruir disparando a unas semiesferas. Se pueden hacer estrategias, suicidios… Vamos, que diversión para un rato.

La verdad, un sitio para celebrar cumpleaños muy original…


sep 30 2008

Aprendiendo griego

Mis padres se han ido hoy a Grecia por un congreso, y como yo tenía curiosidad, les he dado una tabla con las palabras básicas del griego. Entre otras, sé:

Sí (Ne), No (Oci), Hola/Adiós (Yásas), Muy (póli), Bonito (Ómorfo), Feo, (Ásgimo), Chopitos (Kalamária), Márchate (Oxo apo do), ¿Qué…? (Ti?)…

Vamos, que el que no se aburre es porque no quiere…

(La tabla completa aquí)


sep 28 2008

Ahora sí: el último baño

El otro día ya dije que me bañaba por última vez del verano, y hoy creo que va a ser la última del año. 

Con 20º, el agua ya está bastante fría…

sep 28 2008

En el parque de atracciones

Ayer por la tarde había partido de baloncesto, y se fueron mis padres y mi hermano a verlo. A mí no me va mucho ver partidos, y por suerte ese día iban a ir unos amigos de mis padres al parque de atracciones. Así que a eso de las 5 me llevaron hasta allí.
Al principio me monté en un par de atracciones con mi primo Eduardo, hasta que encontramos a Cristina (otra “prima”). Nos montamos en casi todo: en la montaña rusa, en el Quetzal, en el Missisipi, en el laberinto…

La noria

Río navajo

Autos de choque

Missisipi

Gran Tikal (montaña rusa con agua)


Moncayo (montaña rusa)
Revolution: la mejor atracción del parque. Te ponen boca abajo, te hacen dar vueltas y todo eso a 15 metros del suelo. 
En fin, que me lo pasé muy bien. Nos fuimos a las 22:00, y por la noche fuimos a cenar a un bar mientras esperábamos a my family.