VIII Salón del Cómic de Zaragoza
Al igual que todos los años desde hace 8, en diciembre se organiza en el Auditorio de Zaragoza el Salón del Cómic.
Yo este año fui dos días, el sábado y el domingo. Aunque, teóricamente, es del cómic, abundan los videojuegos y las películas y, en general, cosas frikis.
Como siempre, hubo gente disfrazada haciendo cosplay (vistiéndose como personajes de series o cómics).
Había un grupo de espartanos formado por Leónidas, otro guerrero con una cabeza de persa cortada y un sacerdote agitando un pollo de goma atado a un báculo (lo gracioso fue que, más adelante, se acercaron al stand en el que estaba el capitán Trueno contando cuentos a los niños pequeños y se pusieron a golpear las paredes y a gritar. Algunos incluso lloraron).
También estaba el “Supergrupo”, un curioso trío formado por Superlópez, la Cosa y otra superheroína que no conozcocantando la cancioncilla del Equipo A. Y un tipo vestido de algo indefinido con una espada de medio metro de ancho por casi dos de alto. Y un equipo de Bomberman vestido como bombas.
Pero, además de todos esos, vino Francisco Ibáñez, el de Mortadelo y Filemón.
Después de un pequeño homenaje que le hicieron (le regalaron una pluma para que siga dibujando y no se jubile), repartió firmas. Yo me llevé el especial 50 Aniversario, y me dibujó un Mortadelo-foca en 3 segundos, fue increíble.
Me compré una camiseta de Bender, un gorro de Yoshi, un cómic y algunas chapas y, aunque vi una figurita de Rorshach muy chula, era bastante cara para lo pequeña que era. Además, vi a un montón de gente: de la academia de inglés, amigos, ¡incluso a comentaristas del blog!
El sábado por la tarde fui un ratito a jugar al Tetris. Hay que ser bastante bueno para organizar un torneo de un juego, pero yo no me esperaba que tanto: los dos que organizaban la competición ganaron, dejándome a mí tercero… Y no me tocó premio.
¡Sólo queda un día de clase!